TEST
DE COMPORTAMIENTO DE LAS UNIONES TRADICIONALES DE COLA DE MILANO CON
MADERA CONTRALAMINADA. UN ACERCAMIENTO ENTRE TRADICIÓN Y MODERNIDAD.
Partiendo de unos materiales que me fueron regalados por parte de la propiedad de la obra de Riahuelas y otros que Manuel tenía tirados por ahí desde hace varios años, decidimos hacer unos muebles que Enrique necesitaba para su merendero.
Aprovechando el esfuerzo que ello nos iba a suponer, queríamos poner a prueba con un ejemplo tan práctico como utilitario, la viabilidad delas uniones tradicionales aplicadas al tablero contralaminado, que en este caso, al igual que en la obra de Riahuelas, es un producto de Stora-Enso producido en Bad Sankt Leonhardt, Austria.
estudiando en otro proyecto de I+D el desarrollo de una nueva
aproximación industrial hacia el uso de la lógica de los ensambles
tradicionales madera-madera reinterpretados para su uso en
estructuras de grandes prestaciones, tanto de ingeniería civil como
naval. Así pues, nada mejor como plantearse el trabajo manual para
entender los entresijos, pros y contras de este material para
formarse una opinión de viabilidad.
en su momento que ningún ejemplo iba a ser mas apropiado que el de
una mesa y unos bancos para este menester, por el intensivo uso que
íbamos a hacer de ellos y el estrecho control cotidiano que haríamos
de forma natural en las partidas de tute y demás deportes populares
invernales que se realizan sobre la mesa con los nudillos.
los que tenemos relación con la madera sabemos la teoría de la
ejecución de colas de milano en una arista para cajoneras, etc. que
vienen fundamentalmente de la ebanistería. Otra cosa muy diferente
es plantearse el hacerlo a mano sin haber hecho nunca una. Como
el cliente somos nosotros y se trataba de aprender, nos lanzamos.
primer paso consiste en marcar y cortar la pieza de dientes. Nosotros
optamos por colocar la cara de colas de forma que se vieran desde
arriba en la tabla de la mesa. Por tanto el listón de dientes había
de hacerse en las patas.
en la ilusión comenzamos los trabajos sin pensar en hacer fotos
hasta que tuvimos las patas casi listas.
se puede apreciar en la foto, primero se marcan los dientes con
lápiz, luego se cortan con sierra hasta la cota de profundidad
deseada perfilando la forma del diente, añadiendo algunos cortes
intermedios para facilitar el posterior trabajo de vaciado de la
madera intersticial con el formón.
trabajo de hacer los ensambles a mano es bastante arduo cuando no se
tienen los medios más avanzados y ni siquiera un taller, sino que se
trabaja en el suelo de cualquier manera. Obviamente, en estas
condiciones no se puede esperar la precisión óptima en los
acabados, pero la diversión que supone hacer este tipo de trabajos
ya hace que merezca la pena por sí solo el hacerlo si se tiene
ocasión.
el transcurso de los trabajos nos preguntábamos cuál iba a ser el
final de todo ello y si encajarían nuestras primeras colas de milano
o no.
de haber hecho el listón de dientes, es decir, los ensambles en las
patas, se ponen estos en la posición final y se marca en el tablero
de la mesa, la posición del dentado con lápiz de carpintero. Ojo
con marcar o cortar mal los dientes, las colas macizas han de estar
con el lado ancho hacia afuera para que sujeten los dientes. Hay que
vaciar la madera interior. Para no liarse al vaciar, se rellena con
lápiz la parte a eliminar.
esta manera, obtendremos lo que se llama un marcado de colas. Ahora
solo queda hacer los cortes correspondientes y vaciar el sobrante de
las colas al igual que hicimos con el dentado.
hallazgo práctico que era absolutamente predecible por la naturaleza
del contralaminado, es lo diferente que es el trabajo de vaciado de
las colas con el formón. Las fibras de la madera cambian de
dirección de una capa a la otra, lo cual hace un poco más difícil
el trabajo manual. En el caso del corte y el fresado, esto no es
problemático, si lo puede ser en el caso del cepillado de las
superficies laterales.
La
sorpresa que tuvimos fue mayúscula cuando comprobamos lo bien que se
ajustaban las colas y los dientes del ensamble a la primera. Es
decir, entraban perfectamente, si bien lo hacían muy ajustados.
Tanto es así, que, para que entrasen completamente tuvimos que darle
unos buenos golpetazos con un tronco de madera.
que reconocer que estamos sorprendidos también por el hecho de haber
tenido tan pocos
problemas con el contralaminado
teniendo
en cuenta que la madera de abeto es malísima para el trabajo de
talla. Solo saltaron algunos trocitos en las esquinas. Si esto se
pudiera hacer con un contralaminado
de
roble, por ejemplo, habría resultado aún mejor.
cualquier caso, aquí está el resultado final del montaje. Reciclaje
de tableros de contralaminado de madera de Picea Abies, vulgo Abeto,
proveniente de Austria con patas de tablón de 80 mm. De espesor de
pino de Valsaín procedente de la población segoviana con el mismo
nombre. Como homenaje a ambas caras de la misma moneda, hemos
combinado la madera aserrada de la máxima calidad secada bajo
cubierto en mi garaje durante más de 2 años y sin eliminar los
costeros para que se aprecie la madera en su forma básica más pura,
con un producto como el contralaminado, que es un material de muy
altas prestaciones con producción industrial absolutamente
controlada en todo su proceso, desde el corte, el secado, el
empalmado con fingerjoint de sus tablas, el encolado entre ellas , el
corte y cepillado.
emocionante comprobar lo bien que encajan unas con otras.
se aprecian las uniones antes de proceder al tallado de los bordes,
del cepillado de las superficies y de los trabajos de acabado que aún
quedan por hacer. Ya las pondremos cuando haya llegado el momento.
cosa destacable y que no se puede transmitir en imágenes es la
increíble rigidez que tiene esta unión. Está tan apretada que no
es posible ni sacarla ni girarla con la simple fuerza humana. Está
perfectamente encajada a pesar de nuestra ejecución de principiantes
absolutos.
próximo objetivo es el de acometer pruebas con los procedimientos
que estamos diseñando para su fresado y corte industrializado. Estas
pruebas estarán comprendidas dentro de nuestro proyecto de I+D para
el cual este trabajo es un complemento.
Nuca , nuestra Boyera de Berna de más de 40 Kg, esto de la madera no
es sino un problema, una barrera que solo le impide jugar con
nosotros. Lo único que le gusta de la madera es mordisquearla hasta
dejar astillas con sus potentes molares.
La madera, que fastidio, yo quiero jugar !
sin embargo estamos muy orgullosos de lo bien que nos ha salido
nuestra primera experiencia con las colas de milano.
es el resultado de unos cuantos días de dedicación reciclando
madera que estaba tirada por ahí en mi garaje. Es una pena que no
podamos transmitir lo extraordinariamente sólida y estable que es la
mesa. Es una de estas sorpresas que da la madera. Me pregunto, ¿Si
nosotros somos capaces de esto, qué no hará un buen ebanista?
bancos, son el resultado de cortar 3 tiras iguales de un tablero
gemelo al de la mesa y despiezarlas de forma tal que obtuvimos dos
bancos también unidos únicamente con colas de milano y sin clavos,
tornillos ni cola ensamblados tan solo con colas de milano
tradicional
bancos fueron un poco mas difíciles de hacer por culpa de los
problemas que da el vaciado manual con formón a través de las
cambiantes direcciones de la fibra entre las capas del contralaminado
que ya comentamos anteriormente.
importa. Los bancos también son muy estables y resistentes, una
maravilla para el uso que se le va a dar.
es un científico satisfecho, ha investigado, diseñado y fabricado
algo que va a poder usar y sus amigos son unos satisfechos del I+D
porque ya no hay escusas para no invitarnos a desayunar, almorzar,
merendar, cenar, picar, jugar al mus
y
demás ejercicios de tabla, por no tener mesa donde hacerlos.
Saludos.
1 comentario
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Me parece genial el "reciclaje" de este material tan noble y usar los metodos tradicionales para las uniones. Lo mejor de la madera es que se puede trabajarla sin tener una maquinaria especial y sin mayor inversión. Solo hace falta tener tiempo y buenas ideas como han tenido estos chicos.